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Rocío Alorda, presidenta del Colegio de Periodistas: “Más medios públicos es entregar garantías de información a sectores sin acceso”

En el contexto de una sesión de la Comisión de Cultura, Artes y Comunicaciones de la Cámara de Diputados, el presidente del Directorio de TVN, Francisco Vidal, emitió declaraciones que provocaron diversas reacciones en el mundo público, al apuntar a algunos canales privados como contraparte informativa de los medios estatales. Esto volvió a poner en la palestra la discusión sobre el sistema de medios de comunicación en Chile, sus métodos de financiamiento y contenidos. Según la presidenta del Colegio de Periodistas, Rocío Alorda, es importante distinguir entre lo que se entiende por medio público y medio gubernamental, y enfatiza que, en el caso de Televisión Nacional de Chile, “no podríamos hoy decir que TVN es un canal de vocería del presidente Boric. En ningún caso. En ese sentido tenemos una trayectoria de tener un medio de comunicación bastante responsable”.

¿Cuál es la postura del Colegio de Periodistas respecto al debate que ha vuelto a tomar fuerza estas semanas, luego de las declaraciones de Francisco Vidal sobre la modernización de TVN y el ecosistema de medios de comunicación?

Hoy estamos en un momento interesante de retomar un debate respecto al ecosistema de medios de comunicación en Chile. En la mayoría de los países existen ecosistemas de medios compuestos por medios públicos, privados, regionales, comunitarios… Chile en las últimas décadas inició un proceso donde los pocos medios públicos que había -TVN, el diario La Nación- fueron restringiéndose, reduciéndose. A nivel internacional lo que hemos observado es que muchos países han optado por fortalecer el sistema de medios públicos. Nos parece interesante este debate a propósito de que TVN siempre ha estado en una situación un poco incómoda, al ser un medio de comunicación con una misión pública, pero que está obligado a autogenerar sus recursos. Eso hace que sus contenidos sean bastante similares a los otros medios de comunicación privados, y desdibujan la figura de medio de comunicación público. TVN tiene hoy día una señal cultural, una señal infantil que trata de generar contenidos distintos: creo que esas son señales que diversifican los contenidos, y permiten que las audiencias consuman otro tipo de productos. Los contenidos culturales que muchas veces tanto critican las audiencias que no aparecen en los grandes medios de comunicación es porque poner en horario prime un documental interesante y cultural, pero que efectivamente la gente quizás va a ver o no va a ver, en el fondo arriesga un financiamiento. Son decisiones financieras que los medios suelen tomar. Entonces, cuando hablamos de un medio de comunicación público, tiene que ver con un medio que pueda desarrollar contenidos sin tener el temor de que si eso tendrá cantidad de clics o de rating que permita sacarlo al aire. Por eso es tan importante este debate, pues trae la importancia de la diversidad de contenidos en los medios de comunicación. Hoy día los desafíos globales en el mundo de las comunicaciones tienen que ver con abordar los problemas de desinformación y los discursos de odio. Los medios públicos pueden servir para instalar contenidos con mayor diversidad, mayor pluralismo y también garantizar información veraz. Sobre todo en la experiencia europea hay evidencia de que las audiencias que buscan mayor veracidad muchas veces recurren a los medios públicos: la BBC, la Deutsche Welle, France 24.

Hay voces que han planteado que tomando en cuenta la crisis profunda de TVN, tal vez una opción viable sería convertirlo en un canal privado. ¿Cuál es tu visión al respecto en este tipo de casos?
TVN tiene un presente, pero también tiene una trayectoria que es tremendamente valiosa para sus trabajadores y las audiencias. Creo que en ningún caso TVN debería avanzar hacia un medio de comunicación privado. Tenemos suficiente presencia del sector empresarial, y es importante resguardar el rol de un canal público. Pensemos, a propósito del año pasado, de los 50 años del golpe de Estado, la importancia que tuvo TVN en resguardar archivos audiovisuales claves para entender la historia reciente, de defensa de la libertad de expresión en Chile. TVN tiene mucho peso hoy día y justamente uno de los deberes de nuestro Estado debería ser proteger y resguardar la televisión pública en Chile.

¿Considera que las modificaciones al proyecto de ley que propone el gobierno serían efectivas para salvar a TVN de la crisis de financiamiento y funcionamiento en el que está sumido? ¿Expandirlo con la creación de una radio no complejizaría más el panorama?
Las indicaciones que se le hacen al proyecto de ley van en una línea similar a lo que ya había ingresado la segunda administración de Piñera, que tiene que ver con fortalecer la misión pública, ampliar ciertos atributos del directorio y la novedad de generar este fondo que permita capitalizarse y sostener a lo menos la señal infantil cultural, y fortalecer proyectos que estén en base a la misión pública. A mí me parece que es una buena idea pensar en cómo el Estado entrega recursos que luego son capitalizados. Creo que sería un gran aporte generar más medios de comunicación en un país donde la tendencia ha sido concentrar. Este fondo va exclusivamente a financiar la señal cultural infantil, no se mete en la señal abierta y no se mete en 24Horas lo que a mí me parece un exceso, pues podría haber financiado parte de la señal abierta. Si esos recursos permiten, por ejemplo, generar una radio pública, creo que avanzaría por la vía correcta a propósito de este avance de la desinformación, donde los medios de comunicación toman un rol importantísimo. Las y los periodistas necesitamos más fuentes laborales, las audiencias necesitan más contenidos y más diversidad de estos.

A su juicio, ¿cuáles son los puntos centrales en la discusión respecto a la misión pública de los medios de comunicación y la existencia de canales públicos? puesto que no son necesariamente equivalentes. Muchos plantean que los canales privados tienen una orientación pública por más que su propiedad no lo sea.
Claro. Al tener un medio de comunicación ya tienes una responsabilidad pública. Pero efectivamente un medio de comunicación público lo que hace es garantizar que tienen recursos para sostenerse y que su parrilla programática no va a depender del vaivén económico. Nosotros vemos desde el Colegio de Periodistas cómo, a propósito del inicio de la pandemia, la tendencia fue que se cerraron medios porque no había financiamiento. Recordemos la crisis que vivió La Red. Sabemos que sostener un medio de comunicación es difícil, el traspaso al formato digital también ha traído mayores dificultades. Por tanto, cuando hablamos de medios de comunicación públicos tiene que ver con tener medios que su preocupación central sea generar contenidos de calidad manteniendo y respetando los valores de lo público, la democracia, los derechos humanos, pluralismo informativo la veracidad, la ética para garantizar a la gente información de calidad. La comunicación es un derecho humano. En tanto derecho humano, el Estado también tiene que garantizar ese derecho. Entonces, cuando hablamos de medios de comunicación, nos referimos a eso, a medios de comunicación que no tengan que depender de los vaivenes hoy día del mercado para desarrollar tal o cual contenido informativo.

Uno de los argumentos que se contraponen a la propiedad de medios de comunicación estatales se relaciona con que estos deben pertenecer a la sociedad civil, para garantizar valores como independencia de las políticas de cada administración. ¿De qué manera se puede compatibilizar ambas posturas?
Creo que hay bastante diferencia entre un medio de comunicación público y uno gubernamental. En eso hay bastante avance en bibliografía: un medio de comunicación gubernamental es el canal de la vocería. Hoy existen pequeños medios de comunicaciones digitales, y en redes sociales, que dan efectivamente la voz de un gobierno. Lo público tiene que ver con entregar información que beneficie a toda la sociedad. En eso TVN ha sido bastante responsable en mantener la diversidad de opiniones. No podríamos hoy decir que TVN es un canal de vocería del presidente Boric. En ningún caso. En ese sentido tenemos una trayectoria de tener un medio de comunicación bastante responsable -con el paréntesis oscuro de la dictadura, por supuesto-, pero recuperada la democracia, TVN ha cumplido un rol de demostrar de que podemos habitar en un país con distintas opiniones que son capaces de ponerse en diálogo para que sea la ciudadanía quien tome las decisiones respecto a con cuál opinión se queda. En eso Chile es un país bastante responsable. Por tanto, yo le diría a las personas que leen que ahí hay una medida desesperada por tener un medio de comunicación que garantice exclusivamente la opinión del gobierno, que eso es desestimar el rol responsable que tiene el equipo de dirección y de prensa que TVN ha tenido las últimas décadas.

Existe cierta desconfianza a la idea misma de ampliar una red de medios de comunicación pública ¿Cómo se puede ir minando esa desconfianza y cómo se podría garantizar que de ampliarse una red de más medios de comunicación -que tengan esta orientación pública y un financiamiento público- les den a la ciudadanía y a todos los actores sociales las garantías de que van a cumplir ese rol?

Creo que hay un debate en Chile hace mucho tiempo respecto al rol de lo público y lo privado. Cuando pensamos en ampliar un sistema de medios públicos estamos pensando en entregar garantías de información a ciertos sectores, comunidades o territorios que no tienen acceso. Pensemos en la diversidad de Chile, en la dispersión geográfica que nos obliga a pensar cómo la gente se informa. En Chile hay brecha digital, no toda la gente se informa a través de redes sociales. Lo otro es que en Chile, con el aumento de la concentración de la propiedad de los medios y con el centralismo informativo, hay muchos territorios que han quedado sin representación en los medios de comunicación. Hay grandes medios de comunicación que incluso van a las regiones e informan lo que pasa en Santiago. Eso es tremendamente peligroso. Dejar a la gente sin la posibilidad de verse en los contenidos informativos daña el pluralismo. Y creo que en ese sentido, ¿por qué voy a este debate? Porque en el fondo un medio de comunicación público debería garantizar eso, ¿no? Identidad territorial, representación de esos territorios, pluralismo, pero pluralismo con esos actores políticos, económicos, sociales.

¿Considera problemática la propuesta de financiar el canal público en base a un endowment? ¿Qué beneficios y falencias ve en esta propuesta, considerando la alta deuda que acumula TVN por 50 mil millones de el comienzo de un pago del crédito otorgado por Banco BCI, por US$72 millones.

Sin ser experta en la situación financiera de TVN, creo que la propuesta que hacen hoy día de generar un endowment es una solución eficiente para no tener que estar constantemente pidiéndole recursos al Estado. El Estado tiene bastantes empresas públicas que tienen que ir financiando, y efectivamente poner un fondo que tiene recursos bajo las lógicas del mercado, como lo hacen hoy día los fondos de las AFPs, me parece que es una propuesta eficiente pensando en el gasto presupuestario. Hoy día estamos a nivel global en un momento de crisis de financiamiento de los medios de comunicación. Por tanto, hay que fortalecerlos, no hay que debilitarlos.

¿Hasta qué punto se han podido involucrar como Colegio de Periodistas en precisamente esta discusión, pero en el ámbito parlamentario?

Nosotros hacemos seguimiento a todas las indicaciones de los proyectos de ley que se están tramitando en el Congreso. Me parece valioso que este Gobierno, al menos, haya querido indicar en dos proyectos de ley en materia de comunicación: lo de TVN, y nosotros hemos estado impulsando también un proyecto que también patrocinó al Ejecutivo, de protección a periodistas y personas trabajadoras de las comunicaciones. Es un proyecto tremendamente importante y que está en el Senado. Con este proyecto estamos participando en la escucha, e iremos a presentar nuestra propuesta también en la audiencia pública en un par de semanas más. Cuando fue el proceso de cambio constitucional participamos en los dos procesos proponiendo normas para que se desarrollara un sistema de medios públicos. Creo que el debate que se dio en ese momento fue bastante valioso, y queremos retomarlo viendo la posibilidad que entregan estas indicaciones de ley. La tramitación empezó recién la semana pasada, se ingresó hace un par de semanas. Esta semana estuvieron presentes los sindicatos de TVN, así que esperamos que las próximas semanas ya podamos tener un diálogo más directo como Colegio con la comisión.

¿Qué rol deberían cumplir los medios privados en un ecosistema de medios pluralista?

Te puedo decir cuál debería ser el rol en un imaginario más ideal: los medios de comunicación deberían informar, entretener, formar audiencias, ¿no? Creo que en el fondo la responsabilidad social que tienen las empresas de comunicaciones hoy día tiene que ser también un debate público. Informar a la ciudadanía con garantías básicas establecidas en los marcos internacionales de derechos humanos, libertad de expresión, de prensa, acceso a la información, transparencia de información, garantías de pluralismo informativo. Los medios de comunicación deberían, a mi juicio, avanzar en mayores garantías de calidad informativa. Yo creo que estamos un poco al debe, Como en esta lógica de que las audiencias solo quieren entretención o que eso es principalmente lo que puede sostener el sistema de publicidad hoy día. Tiendo a pensar en que las audiencias no son solamente sujetos pasivos de la comunicación, sino que también son sujetos críticos que quieren mayor calidad respecto a lo que entregan los medios de comunicación. Esto no lo digo yo, esto lo dicen también muchos estudios del Consejo Nacional de Televisión que ha levantado cuáles son las principales quejas hoy en día. Tenemos audiencias que son mucho más críticas respecto a los contenidos. Tienen una expectativa de que cada vez los contenidos tengan, por ejemplo, menos sesgos de género, de clase, contenidos de mayor calidad informativa.

Recientemente un episodio de Informe Especial generó una ola de denuncias en el CNTV por el tratamiento al tema de las infancias trans. Ahí entramos nuevamente en la lógica del medio público que tiene un deber de calidad informativa. ¿De qué manera podría reforzarse que el estándar sea igual de alto, independiente del origen del medio de comunicación en sí?

En el fondo más que situar esa responsabilidad exclusiva de los medios públicos, creo que es una responsabilidad colectiva de un sistema de medios de comunicación que quiere justamente informar a la ciudadanía, pero también ser respetuosa con sus audiencias. Es un avance, sin duda, que las audiencias estén más empoderadas y exijan mayor calidad a los medios de comunicación. Ese es el rol de las audiencias. Soy de la idea de que le podemos exigir a un medio de comunicación público la misma calidad, porque una empresa de comunicaciones es una empresa que, podríamos decirlo de esta manera, lucra por entregar información y esta tiene que ser de calidad. Justamente hay este imaginario de que se le exige mucho más a los canales públicos, por entender que basalmente tienen un financiamiento de recursos de todas las y los ciudadanos. Y eso efectivamente es así. Por tanto, el estándar tiene que ser los medios de comunicación público deben tener parámetros éticos, de responsabilidad social, sin sesgos informativos, con garantías de pluralismo. Creo que en los últimos años hemos avanzado más porque las audiencias están más críticas y las audiencias han dejado de consumir ciertos productos informativos que les parecen que dañan sus propias percepciones. El caso de Informe Especial, con los temas de género, los casos de disidencia, tenemos una ciudadanía que está mucho más empoderada en esas materias y los medios de comunicación también tienen que encauzar esos cambios.

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