Autor: Carlos Fardella K., economista de FK Economics.
En el último tiempo en Chile ha habido una considerable escasez de recursos hídricos, generada principalmente por bajas precipitaciones tal como se muestra en la Figura abajo. Podemos ver como a comienzos de siglo la mayoría del territorio chileno tenía un nivel normal o incluso moderadamente alto de precipitaciones. En cambio, en los últimos 10 años esta tendencia se ha revertido llegando a situaciones críticas.
Evolución del índice SPI desde 1988 a 2020
Colores cafés indican sequías, los verdes y azules indican años más lluviosos.
Fuente: Dirección Meteorológica de Chile
En términos económicos, la sequía es costosa. La pregunta es cuánto. Esto es justamente lo que intentan responder Michael Berlemann y Daniela Wenzel en un reciente estudio.
El insumo principal de su estudio son datos entregados por el Instituto Internacional de Investigación para el Clima y la Sociedad. En específico, utilizan el índice estandarizado de precipitación, que mide la cantidad de precipitaciones por país (tal como en la Figura anterior) de 153 países de todo el mundo, entre los años 1960 y 2002.
Ahora bien, no es tarea fácil estudiar el efecto que tienen las sequías en la economía de un país, debido a que en la mayoría de los casos, la calidad y precisión de los índices depende en gran medida del nivel de desarrollo del país. Por lo que si se realizara una estimación simple, se podría encontrar que las sequías producen un mayor crecimiento, pero en realidad se debería a que la mayoría de las sequías se encuentran reportadas en países con un mayor nivel de desarrollo.
Para resolver lo anterior, los autores proponen utilizar la información del ya mencionado Instituto Internacional de Investigación para el Clima y la Sociedad, ya que ellos obtienen de manera sistemática la información, la cual además no depende de las condiciones de cada país, entregando un índice estandarizado de las precipitaciones. Por otro lado, en sus estimaciones también se preocupan de considerar las tendencias anuales globales de crecimiento económico y precipitaciones, al igual que las características de cada zona en particular.
Sus resultados muestran que existe un claro efecto negativo de las sequías en la economía de un país. En específico, se encuentra que una disminución de cerca de 3.000mm de precipitaciones por millón de kilómetros cuadrados, reducen entre 1,5 y 8,5 puntos porcentuales el crecimiento de un país en un lapso que puede perdurar hasta 10 años.
Dado los resultados, los autores luego se preguntan cuáles podrían ser las causas de esta disminución en el crecimiento, encontrando que las principales serían una disminución en la educación (sostenida en el tiempo), y una disminución de la inversión de mediano y largo plazo (entre 5 y de 10 años de sucedida la sequía).
Este trabajo resulta muy relevante, sobre todo en el contexto chileno actual, ya que demostraría las implicancias negativas que tienen las sequías en la economía más allá del sector agrícola. Más aún, como se plantean posibles canales mediante los cuales las sequías afectarían a la economía, nos permite preguntarnos qué está en nuestras manos para mitigar sus posibles efectos negativos.