Por Anton Kullak Zalaquett*
Quién ganó, quién perdió y quién mantuvo su mundo electoral
En 2021 votaron 7,1 millones de personas mientras que el domingo pasado se emitieron más de 13,4 millones de votos. La pregunta que surge inmediatamente es: ¿Por quién votó en 2025 la gente que no fue a votar en 2021?
Si bien los datos a nivel comunal no permiten responderlo de manera precisa, se pueden analizar correlaciones que permiten acercarse, aunque imperfectamente, a una respuesta.
- Qué pasa con los candidatos presentes en 2021 y 2025
Por ejemplo, se puede analizar cómo cambió el porcentaje de votos obtenidos por candidatos en 2021 y 2025 en relación con el cambio en la cantidad de votantes totales. La tabla 1 muestra el valor promedio de dicha relación para cada candidato que estuvo presente en ambas elecciones. Es decir, la tabla muestra cuántos puntos porcentuales aumenta (o disminuye) el porcentaje de votos de un candidato cuando el total de votos en la comuna aumenta en un punto porcentual, capturando así cómo le va al candidato (en comparación a 2021) cuando participa más gente.
En resumidas cuentas, la tabla muestra que en 2025 a Parisi (y en menor medida a Kast) le fue mejor donde entró más gente a votar. Si bien esto no es un resultado causal, nos sugiere que parte del electorado que estaba ausente en 2021 fue capturado fuertemente por Parisi.
Específicamente, se observa para Parisi una pendiente de 8,42%, que indica que, en promedio, cuando el número de votantes en una comuna aumenta en un punto porcentual, el porcentaje de votos que obtiene Parisi crece en 0,084 puntos porcentuales. Esto sugiere que su votación fue particularmente sensible a la participación electoral: le fue mejor en comunas donde aumentó la cantidad de votantes. Algo similar ocurre con Kast (7,09%), aunque en menor magnitud. En cambio, Enríquez-Ominami y Artés presentan relaciones cercanas a cero, lo que indica que su votación no varió sistemáticamente con los cambios en la participación electoral comunal.
2. Qué ocurre con todos los candidatos de 2025
Sin embargo, lo anterior no nos da luces para ver qué pasó con los/as candidatos/as que no participaron en las elecciones de 2021. Para abordar esto, la Tabla 2 muestra cómo varía el porcentaje de apoyo comunal de cada candidato o candidata de 2025, con relación al cambio en el total de votantes en cada comuna (comparando 2021 con 2025).
Grosso modo, se observa nuevamente que Parisi sería el candidato más beneficiado por el aumentó la participación entre 2021 y 2025: a Parisi se le fue mejor donde más gente entró al padrón efectivo.
Yendo al detalle, la tabla anterior muestra que Parisi y Kast tienden a obtener más apoyo en comunas donde aumentó la participación electoral. En promedio, por cada punto porcentual adicional de votantes en una comuna, el porcentaje de votos que reciben aumenta en 0,099 y 0,057 puntos porcentuales, respectivamente.
En cambio, a Jara y Matthei les fue relativamente peor en comunas donde creció más la cantidad de votantes. Es decir, su apoyo fue más alto en comunas donde ya votaba una mayor proporción del padrón en 2021 y la participación creció poco entre elecciones.
Esto parece revelar que existieron dos mundos electorales: (A) Candidatos que crecen donde aumenta la participación y (B) candidatos que rinden mejor donde la participación ya era alta. Parisi y Kast están en el grupo A, Matthei, Jara y Kaiser en el grupo (B).
3. Aumentan los votos: mejora Parisi
El fenómeno Parisi es particularmente interesante por ser el candidato que, tanto en la Tabla 1 como en la Tabla 2, concentra los efectos más grandes con relación al cambio en la cantidad total de votantes de cada comuna.
La figura a continuación ilustra gráficamente este resultado: en el eje horizontal se muestra el cambio porcentual en el total de votos emitidos entre 2021 y 2025 en cada comuna, mientras que en el eje vertical se representa el porcentaje de votos que Parisi obtuvo en la elección de 2025. Cada punto corresponde a una comuna distinta.
La pendiente positiva de la línea de regresión indica que, en promedio, a mayor aumento del número de votantes en una comuna, mayor es la votación obtenida por Parisi en 2025. El coeficiente estimado (0,099) cuantifica esta relación y se muestra en la esquina superior derecha del gráfico.
En síntesis, el gráfico muestra que el apoyo a Parisi crece en comunas donde aumentó con mayor intensidad la participación, reforzando la idea de que su crecimiento electoral está asociado, en parte, a votantes que ingresaron al proceso electoral en 2025.
4. Continuidad del voto Matthei
Otro punto interesante es el desempeño de Evelyn Matthei, que con el 12,5% de los votos quedó relegada al cuarto lugar en las elecciones, lo que ha sido mediatizado como una gran derrota.
Llama la atención que en 2025 Matthei obtuvo un poco más de 1,6 millones de votos, cifra similar al total obtenido en primera vuelta de 2013, donde 1.648.481 personas (25,03% de los votos) votaron por Matthei. Es decir, en términos porcentuales empeoró, pero la cantidad de votantes casi no varió. Así, en cantidad de votos, Matthei casi no retrocedió respecto de su desempeño pasado, lo que sugiere que su desempeño en términos porcentuales se vio fuertemente afectado por el cambio de entorno.
La figura a continuación confirma esta relación a nivel comunal. En el eje horizontal se muestra el número de votos obtenidos por Matthei en 2013, mientras que en el eje vertical se grafica su votación en 2025. Cada punto corresponde a una comuna. La línea de regresión revela una relación estrecha y positiva entre ambos valores: por cada 100 votos que Matthei obtuvo en una comuna en 2013, obtuvo aproximadamente 107 votos en 2025. Esto refuerza la idea de que el desempeño de Evelyn Matthei responde más a cambios en la competencia y composición del electorado que a una pérdida masiva de apoyo previo.
5. Jara hereda el voto Boric
Por otra parte, el apoyo a Jeannette Jara en 2025 guarda una estrecha relación con el respaldo que tuvo Gabriel Boric en la primera vuelta de 2021. El gráfico a continuación muestra cómo, comuna por comuna, por cada punto porcentual adicional obtenido por Boric en 2021, Jara obtiene en promedio 0,82 puntos porcentuales más en 2025. Además, el ajuste del modelo es alto (𝑅2=0,837) lo que indica que más del 80% de la variación en el apoyo a Jara puede explicarse por los resultados previos de Boric. Esto sugiere que Jara hereda gran parte el electorado que apoyó a Boric en la elección anterior, con un patrón de continuidad comunal bastante claro.
Además, se observa que la línea de regresión está sistemáticamente por sobre la línea punteada de 45°, que en el gráfico representa los puntos donde Jara habría obtenido exactamente el mismo porcentaje que Boric en cada comuna. Que la recta estimada quede por encima de esa diagonal implica que, en promedio, Jara no solo reproduce el mapa electoral de Boric, sino que lo amplifica: en muchas comunas obtiene un porcentaje mayor al que Boric logró en la primera vuelta de 2021. Dicho de otro modo, es decir, donde a Boric le fue bien en 2021 a Jara le fue aún mejor en 2025.
6. Kast 2021 vs Kast 2025
En el caso de Kast, también se aprecia un patrón claro: las comunas donde obtuvo altos porcentajes en la primera vuelta de 2021 vuelven a ser sus bastiones en 2025. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurre con con la relación Boric–Jara, la recta de regresión para Kast queda por debajo de la línea diagonal de 45° (la que representa un desempeño igual en ambas elecciones). Esto indica que, si bien conserva su “geografía electoral”, su nivel de apoyo tiende a ser menor en 2025 que en 2021, mostrando una continuidad territorial pero una pérdida relativa de intensidad en esas mismas comunas.
7. El Factor Parisi en Segunda Vuelta
Si bien es difícil predecir el comportamiento de los votantes de Parisi en las urnas para la segunda vuelta de estas elecciones, sí se puede analizar lo que pasó en 2021.
El gráfico a continuación ilustra cómo se relacionó el apoyo comunal a Parisi en primera vuelta con los resultados de Boric y Kast en la segunda. En términos simples, el gráfico muestra esa relación de manera sencilla: en cada comuna, se compara cuánto votó Parisi en la primera vuelta con cuánto subió (en términos relativos) el voto de Boric y Kast entre la primera y la segunda vuelta.
Los resultados indican que existe una relación positiva para ambos candidatos, pero más fuerte en el caso de Boric. Su pendiente estimada (0,0466) es notablemente mayor que la de Kast (0,0197). Esto significa que, en 2021, las comunas donde Parisi obtuvo más apoyo tendieron a votar proporcionalmente más por Boric en la segunda vuelta que por Kast. En otras palabras: allí donde Parisi fue fuerte, Boric creció más.
En resumidas cuentas, los datos muestran que el aumento de votantes en 2025 afectó a los candidatos de forma distinta. Parisi y, en menor medida, Kast capitalizaron el ingreso masivo de votantes que no participaron en 2021; Matthei mantuvo la base votante del pasado, pero perdió terreno relativo en un escenario mucho más concurrido; y que Jara heredó (e incluso amplificó) el mapa electoral de Boric. En cambio, Kast no heredó el desempeño que tuvo a nivel comunal en 2021. Por último, se observa que en la segunda vuelta de 2021 Boric creció más que Kast en las comunas donde Parisi había sido fuerte en la primera vuelta.
En ese sentido, a pesar de que se repitieron varios nombres de elecciones pasadas, esta primera vuelta parece haber sido una elección marcada por la contraposición entre mundos electorales distintos: el de los votantes que ya estaban y el de los que no lo habían hecho en 2021. Entender esa interacción quizás sea la clave para comprender no solo los resultados, sino también el tipo de país político que empieza a emerger con el voto obligatorio.
*Anton Kullak Zalaquett es economista de FK Economics.

















