Por José Ignacio Calderón*.
La contaminación de las urbes es un problema central para los gobiernos, aún más con el desarrollo industrial de los últimos 60 años. En Chile se presentan 16 zonas con altos índices de contaminación, medidos a través de los niveles de material particulado fino (MP2.5) o grueso (MP10) presente en el aire. En algunas zonas, incluso, las empresas estarían muy cercanas a las urbes y generarían grandes impactos a la salud de la población que terminarían siendo catalogadas como “Zonas de Sacrificio”. De esta forma, pilares cruciales del capital humano como la educación, el trabajo y la calidad de vida se verían fuertemente afectadas (Lu et al., 2021; Chang et al., 2016; Hanna & Oliva, 2015; Miller & Vela, 2013).
En particular respecto de la educación, hay un interesante caso abordado por Sebastián Miller y Mauricio Vela en su estudio de 2013 sobre los efectos de la contaminación sobre rendimiento educativo. Ellos establecen que la contaminación afectó fuertemente el sistema educativo en dichas zonas, traducido en una reducción significativa en los puntajes del SIMCE de matemáticas, lenguaje, ciencias e historia.
Para abordar dicha situación, el gobierno chileno se propuso a enfrentar dicho problema: luego de un primer acercamiento en 1994 con la categorización de zonas contaminadas, en 2010 el Estado presentó los Programa de Prevención y Descontaminación Atmosférica (PDA, PPA, PPDA). Estos planes generaron una serie de directrices para la regulación de las actividades sociales y económicas en las zonas, variando en su dureza según los niveles de contaminación presentes.
Sin embargo, la gran pregunta que surge es si estos programas lograron recuperar el capital humano perdido a manos de la contaminación.
En el artículo titulado “Polluted Cities, Environmental Policies, and Student Performance”, busco responder esta pregunta desde el lado de la educación, uno de los pilares claves del capital humano. Particularmente, busco determinar el efecto a corto, mediano y largo plazo que tuvieron políticas de descontaminación en Chile por sobre el rendimiento estudiantil.
El artículo evalúa empíricamente el impacto que programas PDA y PPDA tuvieron en los puntajes SIMCE de cuarto básico en cada zona mediante la comparación de los resultados educacionales en áreas intervenidas por los programas con aquellas no intervenidas, donde ambas zonas antes de la política tenían trayectorias educacionales comparables. La técnica estadística ocupada permite aislar el efecto promedio de las políticas por sobre los puntajes de matemática y lenguaje obtenido, tomando en consideración variables relevantes al contexto, como la escuela, el estudiante y el año, para obtener así una estimación precisa.
Los resultados evidencian que la política presenta efectos positivos sobre los puntajes SIMCE sólo en los primeros años posteriores a la implementación y únicamente para las Zonas de Sacrificio. Sin embargo, al considerar todas las ciudades contaminadas y utilizando un modelo que permite determinar el efecto cada año posterior a la implementación del programa, se encuentran efectos negativos a mediano y largo plazo.
Una posible conclusión es que las políticas de descontaminación no han logrado prevalecer y mejorar la educación de las zonas contaminadas, fallando en recuperar el capital humano perdido, a pesar de que en algunas zonas se han disminuido los niveles de contaminación. Las explicaciones para esto radican desde a problemas de salud persistentes a restricciones de tiempo al aire libre, perjudicando el desarrollo normal del estudiante.
En síntesis, hay un enorme potencial para que el diseño de políticas ambientales se ajuste a las necesidades de cada zona, incluyendo las de sus habitantes. De esta forma, se estaría ayudando a la recuperación de la educación y el capital humano perdido las últimas dos décadas.
*Investigador Human Development Lab, Universidad de los Andes. Magíster en Economía Aplicada, Universidad de Chile.
Bibliografía:
Calderon, Jose-Ignacio (2025) Polluted Cities, Environmental Policies, and Student Performance. Available at SSRN: https://ssrn.com/abstract=5122449. Submitted to Economics Letters (Under revision).
Chang, T., J. Graff Zivin, T. Gross, and M. Neidell (2016). The effect of pollution on worker productivity: Evidence from call-center workers in China. Working Paper 22328, National Bureau of Economic Research.
Hanna, R. and P. Oliva (2015). The effect of pollution on labor supply: Evidence from a natural experiment in Mexico City. Journal of Public Economics 122, 68–79.
Lu, W., D. A. Hackman, and J. Schwartz (2021). Ambient air pollution associated with lower academic achievement among us children. Environmental Epidemiology 6 (5), e174.
Miller, S. and M. Vela (2013). The effects of air pollution on educational outcomes: Evidence from Chile. IDB Working Paper Series (IDV-WP-468), 111–132.